Yoann Offredo explicó el incidente con sus propias palabras en su página de Facebook. "Cuando empecé a correr en bicicleta, no sabía que mi vida iba a estar en peligro en algunas ocasiones. Hoy he sido víctima de un ataque con un cuchillo y un bate de béisbol durante una sesión de entrenamiento junto a dos amigos".
El corredor del equipo Wanty-Groupe declaró en su comunicado no estar enfadado, sino más bien "triste" debido a que "ya no quiere que sus hijos practiquen el deporte que tanto ama", debido a que " es demasiado peligroso".
Un accidente que se produce solo dos días después de que otro ciclista, Michele Scarponi, falleciera en circunstancias completamente distintas tras ser atropellado por un camión mientras se ejercitaba en la región italiana de Marcas.
El corredor del equipo Wanty-Groupe aprovechó la ocasión para denunciar la vulnerabilidad de los ciclistas en la carretera: "estoy triste por comprobar quelos derechos de los ciclistas se siguen ignorando, pese a vivir en el país de los derechos humanos".