A través de su su página de Facebook, la peluquería canina Royal Paws Pet Salon manifestaba su desacuerdo hacia esta nueva actividad. La materia que algunos dueños aplican a sus mascotas contiene purpurina comestible y jarabe de maíz para que se adhiera a la superficie del animal. Algunas peluquerías caninas como Groomies compartieron las imágenes de perros que deslumbraban y "brillaban con luz propia en la zona genital".
Entre los comentarios publicados, los usuarios manifestaron su desaprobación con la alternativa. "Esto muestra el nivel de irresponsabilidad que tienen algunos dueños de mascotas que preferirían que los testículos de sus perros se sumergieran en purpurina y luego los castraran para controlar la población de mascotas", aclaró una persona indignada.
Un experto en adiestrar animales de este tipo calificó esta actitud de "preocupante y perturbadora". Los veterinarios y organizaciones benéficas de bienestar animal advierten que no es una buena idea hacerle este tipo cosas a un animal. "Los perros son seres sensibles que merecen respeto, no son accesorios de moda", ha señalado.
Anteriormente, otras tendencias como hacer tatuajes temporales en la zona del lomo con la excusa de "hacer destacar al animal" sin necesidad de que el dueño se gastase mucho dinero en accesorios.
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