Todo sucedió cuando, hace dos décadas, el jeque, una de las personas más ricas del mundo, aparcó su yate en la localidad italiana por razones de mantenimiento y aprovechó para dar una vuelta por la ciudad. Mientras andaba por el lugar se vio en la necesidad de acudir al servicio, pero no encontraba ningún sitio abierto.
Fue entonces cuando se encontró con Teresa Borsetti, una mujer que en ese momento contaba con 68 años que le dejó entrar a su hogar para que pudiera acudir al servicio. El exemir, agradecido, le prometió que volvería a visitarla.
Según Corriere della Sera, a mediados de agosto, 21 años después, Catar Hamad bin Jalifa Al Thani volvió a Bríndisi y, con la promesa que hizo en mente, se dispuso a buscar a la mujer que le ayudó. Su equipo, después de preguntar en el ayuntamiento, logró dar con su paradero.
Teresa Borsetti, ahora con 89 años de edad, se reunió con el jeque durante una hora. Las medidas de seguridad impuestas no permitieron que se sacaran ni fotos ni vídeos y, por ello, son pocos los detalles que se conocen de la conversación que mantuvieron. Lo que sí se ha podido saber es que Al Thani le hizo un regalo a Borsetti en secreto y que la ha invitado a ella y a toda su familia a Catar a finales de 2018 con los gastos del vuelo pagados.