Una mujer de la ciudad de Changsha (China) ha acudido al médico tras comprobar que parte de los dedos de su mano derecha habían quedado inmovilizados. No hizo falta un diagnóstico para saber la causa: el uso excesivo del móvil.
Según adelanta 'Noticias 24H', la mujer, que se encontraba en su semana libre del trabajo, no soltó el móvil ni uno solo de los días; por lo que a finales de semana empezó un dolor fuerte las extremidades.
Tras esto, experimentó calambres en la mano derecha hasta comprobar que no podía articularla. Los sanitarios del hospital confirmaron que sufría tenosinovitis, una inflamación en el tendón y la membrana que lo recubre. Pero después de haber seguido un tratamiento especial, la mujer ha recuperado la movilidad y se lleva a casa una gran lección.