Una cafetería en Auckland (Nueva Zelanda) ha sido tachada de “racista” después de que una clienta, de origen Maorí, descubriera que en su ticket había anotado black lady (señora negra).
La joven, que quiere permanecer en el anonimato, visitó la cafetería en compañía de una amiga y se sorprendió tras encontrar esa referencia sobre ella. Compartió en las redes sociales la fotografía del recibo, y el dueño del local se ha defendido, como recoge Daily Mail: “Tuvimos trabajando una chica de Corea, así que no creo que tengamos problemas raciales”, zanjó el propietario.
Las redes sociales han enfurecido con este suceso y piden que la cafetería tome medidas contra el trabajador que realizó este hecho y que se disculpe con la joven.