El frenazo a las vacunas de Janssen y Astrazeneca es un duro golpe para alcanzar el objetivo de que el 70% de la población española esté vacunada a finales del verano. Una de las soluciones que se barajan para paliarlo es retrasar la administración de la segunda dosis de Pfizer y Moderna. ¿Es una buena medida? Fernando Moraga-Llop, vicepresidente de la Asociación Española de Vacunología, nos lo explica.
“Me parece muy adecuado en el momento actual de la pandemia y teniendo en cuenta la escasez de la vacuna”, dice el doctor sobre la propuesta. La vacuna de Pfizer se administra con 21 días de diferencia entre dosis y la de Moderna, con 28. “Pero en ambos casos los ensayos clínicos permiten hacerlo hasta el día 42, hasta las seis semanas”, explica Moraga Llop. Por tanto, la medida propuesta tiene “evidencia científica”. ¿Y cuál es el objetivo? “vacunar a un mayor número de personas en un menor tiempo”, afirma.
Pero al experto no le parece que ese retraso de la segunda dosis deba aplicarse a todos los colectivos ya que hay algunos más vulnerables: es el caso de los mayores de 80 años y de las personas “que por una enfermedad de base van a responder peor a la vacunación”. En ese caso, aconseja respetar el intervalo de 21 días en Pfizer y de 28 en Moderna.
La gran pregunta ahora es: ¿qué inmunidad se alcanza al recibir solo una dosis de la vacuna? Moraga-Llop asegura que es “una buena inmunidad, lo que permite espaciar el intervalo de tiempo”. Pone como ejemplo los estudios que se han hecho en las residencias después de que los ancianos recibieran la primera dosis de la vacuna: los datos mostraron una disminución muy importante de las hospitalizaciones y de las muertes.
Las autoridades de Estados Unidos han recomendado suspender la administración de la vacuna de Janssen al detectarse seis casos de trombos (uno de los cuales derivó en muerte del afectado) entre los siete millones de personas que recibieron el fármaco. Por ello se ha retrasado la llegada de dichas dosis a España, que se esperaban recibir este miércoles. La vacuna de Janssen es de una sola dosis, por lo que es una piedra angular en la estrategia de vacunación.
El experto cree que los casos de trombos detectados son muy bajos, de 6 en 7 millones. Y afirma que muchos medicamentos tienen registrados efectos graves que se dan con mayor frecuencia. “El hecho de que se vacune a millones de personas hace que estos efectos afloren”, afirma sobre la vacuna.
Javier Ruiz ha dado más datos sobre la polémica de los trombos. “El riesgo de morir por covid es 25.000 veces más alto que de morir por la vacuna”, ha dicho, con los datos en la mano.