La comisión organizadora del 8M ha participado en el desarrollo de un taller en Cádiz que promueve la autoexploración de los genitales femeninos. No sólo para estar más seguras ginecológicamente, porque conocer las partes íntimas puede salvar la vida de las mujeres, también para mejorar su sexualidad. “La autoexploración masculina está muy normalizada pero parece que, cuando se habla de la femenina, se levantan ampollas y es un tabú con el que tenemos que acabar”, ha dicho una de las promotoras.
También ha explicado que, efectivamente, se ha aconsejado llevar una esterilla, un espejo, un cojín y ropa cómoda aunque, "si hay alguien que no los quiera usar, no tendrá que hacerlo". La polémica se ha generado en torno al nombre que le han dado al taller - han pecado de "inocencia"-; sin embargo, ha servido de reclamo para que se acaben las plazas y para que se apunten mujeres de todas las edades: hasta las de 70 años.