En plena escalada de precios y de la inflación, España ha recibió un nuevo batacazo de la Unión Europea: Bruselas obliga a subir los impuestos al vino, a la cerveza y a las bebidas alcohólicas. Es cierto que España es de los países de Europa que menos grava las bebidas alcohólicas: las arcas públicas ingresan 0 euros por el vino y, tan solo, 0,03 por cada lata de cerveza.
Con el nuevo impuesto: el vino pasaría a aportar 1,29 euros por cada botella de 750 ml., cada lata de cerveza pasaría a 0,14 euros, y las bebidas alcohólicas duplicarían su aportación pasando de 2,69 a 5,13 euros por botella. El Gobierno pasaría a recaudar 1.065 millones de euros al año.
¿Cómo afectará esta medida a hosteleros y consumidores? ‘Cuatro al día’ ha charlado en directo con unos hosteleros que no han ocultado su enfado.