Ayer mismo, el Ministerio de Sanidad tomó la decisión de suspender la vacunación en España con la vacuna de Astrazeneca durante, al menos, 15 días. Nuestro país se sumó así a la larga lista de regiones que ha paralizado la distribución de la vacuna de Oxford, tras aparecer una serie de casos de trombosis en pacientes que se la habían inoculado recientemente.
Después de este anuncio, ‘Cuatro al día’, ha hablado con Joan Pons, el enfermero español residente en Reino Unido que se inoculó la vacuna en la tercera fase de ensayo, es decir, cuando todavía estaba en pruebas y no se había probado su eficacia en el organismo humano.
Joan Pons, que no tuvo ningún efecto secundario, siempre ha sido un fiel defensor de esta vacuna pues, como cree el gobierno de Inglaterra, “es peor no ponerla que ponerla” porque eso le da "tiempo al virus" para que mute y vuelva a matar.
“Lo que ha ocurrido con la vacuna de Astrazeneca es una guerra comercial. Los laboratorios tienen un poder inmenso y esto se ha hecho para desprestigiar a la vacuna de Oxford, para que los demás puedan ganar millones y millones”, ha dicho el enfermero. Además, ha mostrado su preocupación, no por la aparición de trombos, pues defiende que “la vacuna no te hace inmortal frente al resto de las enfermedades”, sino por el parón de la vacunación.