Los trabajadores de seguridad del Museo de Altamira, una de las joyas mundiales de arte prehistórico, han convocado una protesta para este martes a la puerta del centro entre las 10.00 y 11.00 horas de la mañana.
Quieren denunciar el impago de sus sueldos y pedir que se garanticen las condiciones laborales, sociales y económicas que estipula el convenio estatal de seguridad privada.
No han cobrado las nóminas de junio ni julio, ni tampoco la última paga extra. Su empresa es la principal contratista de seguridad del Estado con casi 8.000 trabajadores de los cuales medio centenar están el Altamira. Los sindicatos aseguran que este tipo de empresas buscan el mejor precio de licitación y después desaparecen dejando a los empleados cuantiosas deudas.