Jordi Magentí mató supuestamente a Marc y Paula en el lugar donde va a pescar desde hace años, la playa de la Rierica, en Susqueda. Según la investigación, aquella mañana del 24 de agosto, los jóvenes se disponían a pasear en su kayak por esta zona cuando se toparon con Magentí, que pescaba de forma ilegal usando patos vivos. Marc le llamó la atención y en un ataque de ira Magentí acabó con su vida. Tres disparos sobre Marc, y uno, y definitivo, sobre Paula. Los investigadores descartan por tanto que les matara en su plantación de marihuana. Al día siguiente regresó a pescar allí con su mujer. La dejó sola durante dos horas, tiempo que empleó para hundir el coche de los jóvenes en el pantano. Hoy hemos sabido que Magentí le confesó a un preso de la cárcel que él se deshizo de los cuerpos, pero que el asesino en realidad es su hijo. Una versión que ni el juez, ni los investigadores, se creen. Están convencidos de que Magentí es el autor real de los crímenes.