Los premios, que otorga la revista "Annals of Improbable Research" (AIR) y reconocen los diez estudios científicos más absurdos, se entregaron anoche en la universidad de Harvard, y el trabajo de los investigadores españoles ha sido reconocido con el Ig Nobel de la Paz porque muestra "la guerra silenciosa en las calles", ha señalado el director del Intras, Francisco Alonso.
El director del instituto de investigación valenciano, perteneciente a la Universitat de València (UV), ha reconocido a EFE que el premio fue "una sorpresa" y servirá para dar mayor difusión al artículo y "generar reflexiones, que es lo que al final pretendemos los investigadores".
El estudio, titulado "Shouting and Cursing while Driving: Frecuency, Reasons, preceived Risk and Punishment" ("Gritar y maldecir mientras se conduce: frecuencia, razones, riesgo y castigo", se publicó en el Journal of Sociology and Antropology en 2017, y despertó la curiosidad de los organizadores de los premios Ig Nobel.
"Les chocó que hubiéramos hecho un estudio sobre una conducta tan específica", ya que lo habitual son informes sobre los efectos del alcohol o la velocidad en la conducción, explica Alonso, quien indica que les informaron del premio hace tres meses pero tenían que mantener el secreto hasta la ceremonia de entrega.
El estudio plantea la correlación de la conducción agresiva, los gritos al volante, con los accidentes de tráfico, y recoge una encuesta según la cual el 26% de las personas entrevistadas reconocieron que gritan o insultan durante la conducción, el 5 % lo hacen con bastante frecuencia y un 2 % lo hace siempre.
"Es una conducta que al final tenemos automatizada, repercute en la alteración de nuestra conducta y puede ser el inicio de una agresión física", ha añadido Alonso.
El estudio, fruto de una de las variables que surgió en un macroproyecto anterior sobre las normas de tráfico en España, concluye asimismo que cuando se desarrolla esta conducta agresiva, de gritos, está motivada en la mayoría de casos por la reacción a otro conductor, porque no cumplen las normas o responden con conductas agresivas.
Señala también que sólo un 45 % de la personas que conducen lo hacen sin gritar y los que los hacen es porque es su forma de ser (un 24 %); el 17 % piensa que estas reacciones agresivas son una pérdida de tiempo, y el 15 % asegura que es una cuestión de hábito o educación.
El lema de los premios Ig Nobel es "primero reír y luego pensar", y por ello el director de Intras celebra que el galardón ayudará a difundir el estudio y a abrir una reflexión sobre estas conductas.
En su discurso al recibir el premio, Alonso comentó en tono jocoso que los vehículos también se utilizan para hacer el amor y que puestos a elegir es mejor optar por "los usos más beneficiosos" y no por los traumáticos, y concluyó con una metáfora en la que hizo referencia a las actitudes agresivas en la conducción y la guerra: "uno comienza a chillar y acaba agrediendo" al otro.