Los duques de Sussex han puesto en jaque a la monarquía inglesa con su última entrevista, en la que Meghan Markle, muy afectada, ha confesado que la propia Casa Windsor tuvo serios prejuicios “sobre el color de la piel” que iba a tener su hijo, Archie, fruto de su matrimonio con el Príncipe Harry.
La que fuera una famosa actriz americana confesó también que las presiones de la monarquía británica le hicieron pensar en el suicidio "de una manera constante" y, en 'Cuatro al día', Jaime Peñafiel ha calificado esta declaraciones como propia de una persona "desequilibrada":
"Era una desequilibrada, igual que lo era Lady Diana. Lo que Harry ha querido hacer es resucitar a mamá, dando la misma entrevista, hablando de suicidio y montando un circo contra una institución que merece respeto", han sido sus duras palabras. Incluso, le ha parecido un mal gesto que estos padres, que están esperando la llegada de una niña, la vayan a llamar Diana, en honor a su abuela fallecida.
Además, Peñafiel ha mostrado su comprensión con respecto a los comentarios "racistas" que los de Windsor pudieran hacer sobre el color del piel del pequeño Archie. "Es que la abuela de Meghan era completamente negra y yo entiendo que hubiera una curiosidad y que se hicieran los típicos chascarillos sobre el color que iiba a tener el niño", ha dicho en CAD.