Usar cascos con el volumen alto pueden perder audición. Es la advertencia que ha lanzado la OMS, que ha señalado que hasta mil millones de jóvenes podrían perder la audición por este motivo. El uso de los casos han aumentado significativamente en los últimos años. Los más afectados los llamados millennials, es decir, aquellos que nacieron entre 1981 y 1993. Día tras día usan los casos sin saber que su pasión por la música, puede acarrearles graves problemas de salud.
El número de personas con pérdida auditiva está creciendo significativamente, según la alerta la Organización Mundial de la Salud.
Se prevé que dentro de 30 años una de cada diez personas sufran pérdida de audición. Desde la OMS proponen una solución muy fácil. “Lo que proponemos es por ejemplo la reducción automática del volumen”. Lo que no sabemos es si estas medidas les va a gustar tanto a los millennials y a los fabricantes de tecnología.