A veces las redes sociales son nuestro peor enemigo y este joven argentino lo ha descubierto. Publicó la imagen del cuello de su novia, repleto de chupetones, creyéndose la excusa de ella de que se trataba, en realidad, de moratones sufridos en una batalla de paintball.
La imagen dio la vuelta al mundo a través de Facebook, donde los internautas aconsejaban al joven dejar a la chica porque la que sufría no era ella, si no él con sus engaños. El chico, Michael Duarte, comprendió que se trataba de un engaño de su chica y dio la razón a los cientos de comentarios de la publicación "los modernos trajes de protección que se usan hoy día en los clubes de paintball no habrían permitido dejar estas marcas".