Pedro e Isabel acabaron con la vida de su madre para quedarse con sus 1.000 euros de pensión
El hijo ha confesado que él mismo la asfixió
Morir a manos de tus hijos por 1.000 euros. Es lo que le pasó a Ángela, la anciana ciega, asesinada por sus hijos en Pozodón, Teruel. El hijo ha confesado que asfixió a su madre y después la emparedaron en un armario.
De la pensión de Ángela vivían sus hijos, Pedro e Isabel, y por ese dinero decidieron matarla. Al menos es lo que ha confesado el hijo. El Heraldo de Aragón informa que la pensión de la mujer era de 1.000 euros.
Fueron los vecinos quienes alertados porque hacía mucho tiempo que no veían a Ángela, a la que conocían desde que llegó al pueblo, hace 20 años. Los hijos usaban como excusa su movilidad reducida pero tampoco dejaban entrar al médico.
Pedro e Isabel han sido detenidos por el presunto asesinato de su madre y se investiga también un fraude a la seguridad social. La autopsia determinará las causas de la muerte de la anciana. El caso se encuentra bajo secreto de sumario.