España es el país de Europa con un mayor porcentaje de ludópatas menores de 20 años. Una adicción al juego que suele comenzar en las máquinas tragaperras pero que se agrava por la infinidad de juegos online y casas de apuestas.
Tras ocho años de adicción al juego, Daniel tocó fondo hace 11 meses, desde entonces, a un centro para tratarse. El tratamiento al que tiene que someterse exige un estricto control: no puede llevar dinero ni DNI. Su testimonio es también una advertencia a millones de personas especialmente jóvenes que pueden estar muy cerca de caer en el pozo negro del juego.