El viento puso en serios aprietos ayer a dos trabajadores de mantenimiento de ese edificio de la ciudad canadiense de Edmonton. La plataforma desde la que limpiaban los cristales de la fachada comenzó a moverse a merced del viento y se estrelló varias veces contra la pared del edificio. Uno de los trabajadores cayó al vació pero afortunadamente llevaba el arnés de seguridad y, tras pasar unos minutos colgado, pudo ser rescatado por los bomberos.