El próximo 9 de mayo decae el estado de alarma, pero el Gobierno ya ha anunciado que se ampliará tres meses más la moratoria en el pago de los alquileres y también la suspensión de los desahucios. A pesar de ello, Olga, que está a punto de perder su casa, no cree que sea la solución: “Es pan para hoy y hambre para mañana”.
La vivienda de Olga fue adquirida por un fondo buitre y ahora no le dan la posibilidad de quedarse en ella, a pesar de haber pagado 98.000 euros. “Ahora me piden 67.000 euros que me es imposible pagar, no puedo más, tengo un trabajo precario de cuatro horas y no llego a 400 euros”, explica.
Olga tiene tres hijos a su cargo y todos pueden quedarse sin un techo en los próximos meses. “A esos fondos buitre les da igual todo”, se queja Olga. Además, ha perdido los 98.000 euros que invirtió y sigue pagando al banco, como ella misma ha contado. Su situación ha indignado a Joaquín Prat, que no da crédito: “No pueden pasar estas cosas”.