Cuando Thomas fue dado en adopción, jamás imaginó que recaería en la familia “perfecta”. La policía de Essex (Inglaterra) rescató al niño de su hogar siendo muy pequeño, cuando recibieron informes de que sus padres lo estaban dejando solo. No solo el niño pasaba largas horas sin compañía, sino que la policía también descubrió que Thomas vivía “encerrado” en el piso de arriba de la casa “en condiciones muy malas”, como recoge Daily Mail.
La incertidumbre y el nerviosismo llegaron a la vida de Thomas al ingresar en un orfanato y ser puesto en adopción. “Al principio estaba un poco nervioso y triste por haber dejado a mi familia”, declaró Thomas. La sorpresa del niño fue mayúscula cuando lo adoptaron Steve y Paul, una pareja homosexual, aunque desde entonces tiene la familia “perfecta”.
En un evento celebrado para preparar la semana de Adopción y Fomento del movimiento LGTB en Reino Unido, Thomas alentó a los posibles padres adoptivos diciéndoles que sus padres eran “geniales” y, a partir de su adopción, él ya estuvo bien. “No podrían ser mejores padres y todo funciona a la perfección”, reiteró el joven de 12 años.
Los padres de Thomas también ofrecieron su versión y reconocieron que al principio les preocupaba que “tener padres homosexuales pudiera exponer al chico a la intimidación”, pero aseguraron que la experiencia está siendo “muy positiva”. “La adopción es un viaje maravilloso y debe ser compartida por mucha más gente”, añadieron Steve y Paul.