Fuera de peligro los dos guardias de seguridad heridos anoche por hinchas radicales, en Bilbao. 400 ultras del Olimpic de Marsella se enfrentaron al amplio dispositivo policial, que les requisó navajas y barras de hierro, aunque pudieron introducir bengalas en el estadio, provocando momentos de pánico. Hace tan sólo 15 días un ertzaina murió -de un infarto- en otro dispositivo de seguridad previo a un partido de futbol.