Nueva noche de fiesta en el centro de las grandes ciudades. En esta ocasión las calles han estado tomadas tanto por la policía como por los miles de jóvenes con ganas de fiesta antes y después del cierre de los locales a las doce.
En Madrid, había mas preocupación tras lo ocurrido la noche del sábado pasado y al ser hoy San isidro. Ante esta festividad se produjo un despliegue policial sin precedentes, con un control absoluto de las calles, incluso por aire, con un dron.
Entre los que no son vecinos, muchos entienden que haya tanta policía. En cualquier caso, muchos solo quieren salir a dar una vuelta o buscar planes alternativos. Una legalidad que vigilan en Madrid 1140 policías municipales y 1100 nacionales.
En Barcelona la noche también ha sido larga y con mucho trabajo para la guardia urbana por las aglomeraciones y botellones en distintos puntos de la ciudad. Ha habido mas de 7.000 desalojados, y es que las imágenes de jóvenes llenando calles, plazas y playas sigue repitiéndose una noche más.
La fiesta arrancaba en el paseo del borne con botellones y sin distancia de seguridad. La fuerte presencia policial no frenaba las intenciones de celebración que se acababan trasladando hasta arco del triunfo.
La labor de la guardia urbana dispersaba a los jóvenes y los llegaba a desalojar de la playa de la Barceloneta. En total, 7180 personas desalojadas en la última noche en los espacios espacios más concurridos.
Entre los que han salido a la calle, muchos extranjeros que aseguran haber llegado a la ciudad condal par disfrutar de la fiesta.
Una noche más el desmadre ha vuelto a ser protagonista en una comunidad donde la incidencia acumulada sigue superando los 200 casos por cada cien mil habitantes.
En otras ciudades se han producido escenas parecidas, las de los botellones y las de las intervenciones policiales. Por ejemplo, en Sevilla, donde las fuerzas de seguridad han tratado de que no se produjeran las imágenes de descontrol que vimos la semana pasada. También en Salamanca donde la presencia policial ha evitado botellones en la Plaza Mayor, identificando además a decenas de jóvenes que portaban alcohol.