Chris Kooluris es un exitoso profesional de Relaciones públicas en Nueva York, que planeba vender su apartamento y casarse con su novia, según ha publicado Metro News.
Sin embargo, de pronto su vida dio un vuelco, cuando descubrió el mundo de los videojuegos de los años 80 a través de un libro y estos se convirtieron en su obsesión.
El 'Ready Player One', un libro sobre la cultura de los juegos de 1980, "me impactó, despertó algo en mí y empecé a pensar que tenía que estar rodeado de todas esas cosas con las que crecí y que amaba".
Así que hizo lo que consideró lógico: gastarse 24.000 euros en transformar su casa en una sala de juegos típica de los 80. (En las imágenes se ve el antes y el después).
Al principio, su novia lo apoyó y lo ayudó a diseñar los mosaicos coloreados del suelo, pero él admite que lo consumió la obsesión.