Este sector, recoge el informe, genera unos ocho millones de puestos de trabajo, y se estima que por cada empleo directo se generan de media 26,7 empleos indirectos, "cuando por ejemplo en la industria del automóvil se calcula que por cada puesto de trabajo directo se genera 6,3 indirectos".
Por ello, los responsables comunitarios consideran que la gestión y conservación del patrimonio cultural de los países miembros es "esencial para mantener esta oferta incomparable para los viajeros europeos y de cualquier procedencia". La UE ha destinado 6.000 millones de euros para el período 2014-2020 y una partida de 100 millones de euros se ha asignado en concreto a la investigación en patrimonio en 2018 y 2019.
Además, para promocionar estos destinos, el Consejo de Europa ha ideado 32 itinerarios certificados, 19 de los cuáles pasan por España y permiten seguir las huellas de las más diversas épocas históricas. En ellos figuran los caminos del arte rupestre prehistórico o el Camino de Santiago, (primer itinerario cultural certificado en 1987), pasando por las rutas de los vikingos, del legado Andalusí o del Emperador Carlos V entre otras.
Concretamente, España cuenta con 47 lugares patrimonio de la humanidad de la Unesco, como la torre de Hércules en A Coruña, el Real Monasterio de Santa María de Guadalupe en Cáceres, las Cuevas de Altamira en Cantabria, Monte Perdido en el Pirineo de Huesca o, el más reciente de ellos, la ciudad palatina de Medina Azahara.