Los investigadores de la Universidad de Pittsburgh, Illinois y Rice han realizado un estudio sobre la atrofia en el hipocampo, una región del cerebro muy vinculada a la memoria. Las caminatas de 40 minutos, realizadas tres veces por semana, contrarrestan el decrecimiento del órgano, que se produce por la edad, llegando incluso a crecer un 2%. En otros términos, este crecimiento equivale a que el cerebro rejuvenezca dos años.
En cualquier caso, este ejercicio no es la cura de enfermedades graves que afectan a la memoria, como el Alzheimer. Pero sí es una manera de prevenirlo, ya que ayuda a mantener una mente sana, tal y como recoge ‘Espazio Natura’. Además, no vale con practicarlo muy de vez en cuando, las caminatas deben realizarse durante un año.
Asimismo, el trabajo, que ha analizado a 120 personas de entre 55-80 años, expone que si se combinan estas caminatas como ejercicios mentales, los resultados pueden ser aún mejores. Por ello se recomiendan que también se hagan puzles o actividades similares a una edad temprana para evitar cuanto antes el deterioro de la memoria.