El 'Equipo Pegaso' de la Guardia Civil controlará el uso de drones
El Equipo Pegaso de la Guardia Civil controlará el uso de drones. Llevan más de dos años haciendo prácticas y a partir de ahora los que incumplan las normas podrán ser sancionados.
El 99% de los usuarios de estas aeronaves pilotadas por control remoto no sabe que deben tener unos conocimientos mínimos para evitar incidentes con otras aeronaves y no poner en riesgo la seguridad de los ciudadanos. Hay zonas controladas y restringidas. El Equipo Pegaso de la Guardia Civil controlará el uso de drones. Llevan más de dos años haciendo prácticas y a partir de ahora los que incumplan las normas podrán ser sancionados.
El 99% de los usuarios de estas aeronaves pilotadas por control remoto no sabe que deben tener unos conocimientos mínimos para evitar incidentes con otras aeronaves y no poner en riesgo la seguridad de los ciudadanos. Hay zonas controladas y restringidas.
Obligatorio es tener la documentación y las placas identificativas de los sistemas, pilotar a distancias inferiores a las permitidas en los aeródromos sin acuerdos de coordinación o volar en situaciones de emergencias sin la correspondiente autorización.
La proliferación de este tipo de aeronaves ya ha ocasionado distintos accidentes. El Equipo Pegaso ya dispone del material necesario para detectar, localizar, identificar e inhibir la señal de estos drones. Cuentan con un rifle, conectado a un módulo auxiliar, que permite desinhibir las bandas de frecuencia y neutralizar el sistema. El dron termina volviendo a casa, queda estático hasta que termina la batería o vuela hacía los agentes.
Obligatorio es tener la documentación y las placas identificativas de los sistemas, pilotar a distancias inferiores a las permitidas en los aeródromos sin acuerdos de coordinación o volar en situaciones de emergencias sin la correspondiente autorización.
La proliferación de este tipo de aeronaves ya ha ocasionado distintos accidentes. El Equipo Pegaso ya dispone del material necesario para detectar, localizar, identificar e inhibir la señal de estos drones. Cuentan con un rifle, conectado a un módulo auxiliar, que permite desinhibir las bandas de frecuencia y neutralizar el sistema. El dron termina volviendo a casa, queda estático hasta que termina la batería o vuela hacía los agentes. Las multas superan los 4500 euros.