Manu Lajarin se ha trasladado hasta Torrevieja para entrar en el edificio que ha estallado en plena ciudad, después de que un vecino haya detonado varias bombas de gas y gasolina. No todas han explotado y el programa ha podido grabar las bombonas que han quedado en pie y, también, cómo han quedado el resto de las viviendas después de esta explosión intencionada. Los bomberos han dicho que sido un "milagro" que no hayan estallado todas, pues estaban "estratégicamente colocadas".

El hombre, de unos 60 años, que ha provocado la explosión de su propia casa (ha saltado literalmente por los aires y ha llenado de metralla los edificios cercanos) se ha dado a la fuga después de cometer este delito que, afortunadamente, no se ha cobrado ninguna vida. Únicamente, una de las vecinas ha perdido el conocimiento cuando ya todo el mundo se encontraba a salvo y fuera del edificio.

El presunto autor de la explosión acaba de salir de la cárcel, donde había pasado tres meses por pegar a na vecina y romperle la mandíbula, según explican los dueños de los pisos afectados. "Le habíamos visto desnudo y amenzaba a la gente con una catana", ha dicho uno de los vecinos, añadiendo que también había advertido de que iba a derrumbar el edificio. Finalmente, lo ha hecho.