Finalmente, se han confirmado las sospechas de los Mossos d'Esquadra: los agentes han encontrado, en una zona boscosa, el cadáver ahorcado de Martín Ezequiel, el hombre acusado de haber matado a su hijo de dos años en un hotel de Barcelona.
El presunto asesino asfixió al pequeño con una de las almohadas de la habitación y avisó a la madre de lo que se iba a encontrar cuando llegara al alojamiento a por su hijo, por lo que se trataría de un caso más de violencia vicaria.
La policía sospechaba que, después de cometer el asesinato, Martín, que había huido hacia la montaña de Montjuic, se habría suicidado. Ahora, después de 27 días y de muchas dudas sobre si habría conseguido salir del país en avión o no, se ha localizado su cuerpo sin vida y sin signos de violencia externa.