La mujer asesinada en Xátiva ha dejado una hija. Una amiga en redes ha lamentado lo sucedido, ha prometido que encontrarán a su asesino y que se encargará de que a su hija mayor no le falte nada. La mujer, de 36 años, fue encontrada en su casa por su novio cuando regresó de trabajar.
Isabell Elena Raducanu estaba a punto de darle una hermana a su hija. Estaba embarazada de seis meses de una niña. El pasado abril publicó en su Facebook una ecografía de su bebé.
Por este bebé y por la otra hija que tiene, su amiga Magnolia Molines Dominguez le ha prometido en una carta abierta en Facebook que no descansará hasta que encuentren a su asesino. Igualmente le dice que se hará cargo de su hija, a la que querrá como ella la quería.
Fue su novio, quien la encontró en su casa muerta cuando volvió de trabajar y avisó a la policía con la que colaboró en todo momento. Todas las hipótesis están abiertas. Algunas fuentes señalan que la mujer ejercía la prostitución pero el delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Fulgencio Tejedor, no ha querido confirmarlo como tampoco ha admitido relación con ajustes de cuentas.