Cristina Pérez, víctima del saqueo en Logroño: “El asaltante no era mi hijo”
La empresaria nos relata los daños sufridos en su tienda el pasado sábado: “Todavía no sabemos el total de las perdidas”
Un bulo asegura que el hijo de la empresaria fue uno de los saqueadores de su propio establecimiento
Un equipo de ‘Cuatro al Día’ se ha desplazado hasta el centro de Logroño para hablar con la propietaria de una de las tiendas arrasadas por los violentos el pasado sábado. Todavía con el miedo en el cuerpo he intentado poner orden en un establecimiento destrozado, Cristina Pérez, nos ha explicado cómo se sintió ante esta lamentable situación y sobre todo, ha querido aclarar los rumores que aseguraban que su hijo era uno de los asaltantes de su establecimiento.
Según se publicó en varios medios y se ha divulgado en redes sociales, uno de los jóvenes que cargaron contra la policía de Logroño era el hijo de la empresaria, el mismo que luego aparecía dentro de su tienda ayudándoles a reparar los destrozos. Algo que Cristina ha negado con rotundidad “Mi hijo tiene 37 años y este joven 17”.
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Además, la empresaria ha aclarado lo que se ve en las imágenes: “Este chico actuó en la bronca que hubo en el Espolón, tirándole piedras a la policía, pero nosotros no lo sabíamos… Cuando nosotros llegamos a nuestro establecimiento, este chico ya estaba en la tienda recogiendo las perchas y ayudando a recoger y en ese momento, mi marido le pidió a él y a todos los que nos estamos ayudando que se pusieran gel hidroalcohólico para evitar posibles contagios”.
El joven mostró mucho interés por el establecimiento y “Al día siguiente ese chico regresó y preguntó si estaba todo bien”. Ante esta situación, la empresaria ha querido lanzar un mensaje: “Ni periodista ni gente en las redes sociales tienen por qué comentar nada que no saber porque nos han hecho mucho daño en lo personal y en lo comercial”.
Joaquín Prat ha querido saber a cuánto ascendían las perdidas en su negocio por el saqueo y vandalismo, pero todavía son daños incalculables: “No lo sabemos porque también nos rompieron el programa informático, 7 maniquís que rompieron y tienen que venir de Francia, los escaparates, el género que se han llevado…”.
La otra cara de la moneda, serían las decenas de jóvenes que la mañana después de los disturbios salieron a la calle para ayudar a arreglar los destrozos y que según ha podido saber el programa están siendo amenazados por los violentos.