Al coste emocional y social de la crisis en Barcelona, se suma el coste económico de la destrucción causada por los violentos. Pérdidas en comercios, temor de los inversores y una ciudad irreconocible.
Los comerciantes de Via Laietana, una zona muy comercial en la ciudad condal, que durante toda la tarde de ayer fue tomada por los manifestantes y policía. Los comerciantes aseguran que han perdido en torno al 30-40% de sus ventas, los clientes no entran, no venden y además son ellos los que tienen que hacer frente a los destrozos causados por los manifestantes.