Hughes residía en la localidad de Coalisland y había confesado a su familia y a la Policía que era víctima de este acoso a través de las redes sociales días antes de tomar la trágica decisión, según cuenta la BBC.
Los investigadores, según ha informado la dirección del centro donde estudiaba el joven, sospechan que Hughes pudiera incluso ser víctima de un chantaje por parte de redes internacionales que le estarían exigiendo una cierta cantidad de dinero.
El funeral por Ronan congregó a cientos de amigos y conocidos del joven que este martes mostraron su dolor y tristeza por su muerte. Él y su hermano eran monaguillos en la iglesia de San Patricio, templo en el que se celebró la ceremonia.
Este caso ha llevado a la policía a recordar a los adolescentes británicos el peligro que encierra el uso despreocupado de las redes sociales al tiempo que lanza una serie de recomendaciones para intentar evitar casos de ciberacoso como el que ha llevado a Ronan Hughes a quitarse la vida con tan solo 17 años de edad.