El 17 de agosto se recuerda a las 16 victimas de los atentados de Barcelona y Cambrils de los que se cumplen dos años. En el mismo punto de La Rambla donde se detuvo la furgoneta de los terroristas se ha llevado a cabo un homenaje. Un madre rota de dolor mientras se escucha Cant Del Ocells. El primero de los tres actos en los que esta vez no han estado ni el Rey Felipe VI ni el presidente del Gobierno. Sí han estado los representantes de la Generalitat, la delegada del Gobierno y el ministro en funciones Grande Marlaska. No se incluyeron discursos políticos para dar protagonismo a las víctimas.
Aquella tarde de horror en Barcelona la vivieron en primera persona Silvia y Ramón. Dos años después recuerdan lo que ocurrió, cómo lo vivieron y cómo aún hoy les sigue afectando el recordar el día en el que La Rambla se convirtió en un auténtico "infierno".