Qué fue de los agraciados con el Gordo de la Lotería de Navidad

Lo de la Lotería de Navidad es como en los cuentos. El Gordo siempre toca en un barrio de clase trabajadora. Hemos encontrado a algunos de los afortunados con el Gordo en 2012. A Antonio, jubilado madrileño, le tocaron cuatro millones de euros, reformó su casa de siempre, donde sigue viviendo, compró otra vivienda que tiene alquilada y el resto lo repartió entre sus hijos y familiares. La historia de Javier, dueño de un bar, es parecida porque sigue trabajando. Lo mismo le ocurre a Rafael, un sevillano premiado en 2007. Compró una casa e hizo algún viaje, pero sigue madrugando cada mañana. Esther también se compró un piso y montó un bar y advierte de que el dinero se va rápidamente. Al final va a ser cierto el dicho: “Solo para tapar agujeros”.