El coronavirus en Italia se expande rápidamente. Son ya 11 los fallecidos por el COVID-19, los últimos en esta misma jornada: tres en Lombardía y uno en el Hospital de Treviso de Veneto.
Entre las víctimas se encuentran dos octogenarios, uno de ellos ha fallecido en un hospital de Milán. Este había sido hospitalizado el pasado jueves tras sufrir un infarto. Según confirmó el Corriere Della Sera, otro fallecido es un hombre de 62 años de Castiglione d'Adda y que sufría de enfermedades anteriores. Los cuatro han fallecido en 24 horas, mientras aumentaban hasta los 229 los casos confirmados de coronavirus.
El Gobierno de Giuseppe Conte ha ordenado la cuarentena obligatoria por decreto ley en 11 pueblos del norte de Italia, donde han quedado cerrados colegios, cines, museos y oficinas públicas.
Localidades desiertas, mientras las autoridades siguen sin resolver la incógnita de cómo llegó el virus a Italia. En el foco del Véneto los ciudadanos chinos que estuvieron en contacto con el anciano fallecido el viernes han dado negativo en las pruebas, según ha informado el Gobierno regional.
Al igual que el ejecutivo de 38 años, recién llegado de Shanghái, hasta hoy era el posible paciente cero de Lombardía, donde el virus se ha cobrado una tercera víctima: una mujer enferma de cáncer en Crema. Sin embargo, tras los análisis se ha descartado. El gobernador de la Lombardía, Attilio Fontana, explicó que se están "siguiendo dos hipótesis, e intentaremos entender si una de las dos es correcta”.
En muchas ciudades y pueblos del norte de Italia la gente hacía cola en los supermercados desde las ocho de la mañana de este domingo para comprar todo lo necesario y estar preparados para una cuarentena en casa. Las estanterías a mediodía estaban completamente vacías tras el pánico de la población a que el coronavirus afecte al país por un largo periodo que nadie sabe cuánto pueda durar..