Este lunes comienzan las maniobras militares de la OTAN más importantes en África, las African Lion 2021, encabezadas por Estados Unidos y Marruecos. Desde el principio, Marruecos insistió en que se celebrarían en el Sahara Occidental hasta que en el último momento ha sido Estados Unidos quien le ha corregido y ha asegurado que no cruzarán territorio ocupado. Se celebran todos los años pero esta vez España no participará.
Otros ejercicios militares celebrados este marzo entre EE.UU y Marruecos, cerca de Canarias, no fueron avisados y provocó problemas en la navegación aérea de la zona. Las maniobras militares son otro elemento más de presión de Marruecos ante España, aparte de la migratoria, y que ya comenzó desde el mismo momento que Marruecos se independizó de Francia.
Incluso antes, como bien explica Emilio Marín en su su Atlas “Ifni, Sáhara, Guinea, Últimas colonias” (Ed.Susaeta) . Así, en 1953 cuando Marruecos aún estaba bajo protectorado francés, el sultán Yusuf, abuelo del actual rey de Marruecos, fue obligado a exiliarse. Sin embargo, sus partidarios encontraron apoyo en la zona española del Sahara. Pero una vez de vuelta a Marruecos, donde se proclamó primero emperador y después rey con el nombre de Mohamed V, permitió los ataques a la parte española a través de su Ejército de Liberación.
Así que cuando Marruecos consiguió la independencia intentó hacerse con el enclave español de Sidi ifni en 1957. Pese a que los españoles ganaron la guerra, muriendo 300 de ellos, a los pocos meses Franco entregó a Marruecos, sin conseguir nada a cambio, Cabo Juby, más al sur y finalmente Sidi Ifni en 1969.
Primero en Sidi Ifni y después en el Sahara Occidental es donde se crió y vivió su adolescencia Tomás Bárbulo. Posteriormente se hizo periodista especializado en el Magreb donde ha viajado en multitud de ocasiones. Es autor del libro “La historia prohibida del Sáhara Español” ( Ed. Península) en el que con abundante documentación describe todo lo que se ocultó sobre la ocupación de la que fue la provincia española más grande de todas. Tomás nos cuenta como ha sido el proceso de ocupación del Sahara y el desplazamiento de la población saharaui. “Ha sido exactamente igual que como ha hecho Israel con la población palestina. Va ganando la batalla demográfica trasladando población marroquí en esos territorios”.
Nos encontramos en 1975 y desde hace años que el Sáhara español sufre los ataques de los independentistas del frente polisario por un lado y los de Marruecos por otro. A esto se suma la presión de la ONU para descolonizar el territorio. Así pues, España prepara para mayo de 1975 el referéndum de autodeterminación. Tenía incluso el censo listo. Marruecos maniobra para que no se realice. Hasta que aprovechando que España estaba con el dictador moribundo y camino a la inestabilidad política, utiliza a su población civil, escoltada por militares y respaldada por los EE.UU para ocupar el Sahara.
El apoyo de EE.UU a Marruecos era para contrarrestar la cercanía de Argelia al bloque soviético. A ello se suma las corruptelas del régimen franquista como señala Emilio Marín cuando habla de que Jose Luis Solís, ministro franquista, era partidario de un Sahara marroquí. La razón, el ministro era el que administraba los negocios en España del rey Hassan II.
El caso es que España sale a toda velocidad del Sahara Occidental dejando tras de sí un problema que aún hoy seguimos arrastrando. Es la de una población, los saharauis, que fueron abandonados a su suerte sin permitirles decidir su futuro.
Marruecos aparte de quedarse con los bancos pesqueros también se hizo con las minas de fosfatos. Es un mineral fundamental para los fertilizantes. De hecho se apropiaron de los yacimientos que descubrió y sus infraestructuras. España fue el constructor de la mayor cinta transportadora más larga del mundo, que va desde las minas de Bucraa hasta el puerto del Aaiun.
Pero la presión de Marruecos no descansa. Como señala Ignacio Cembrero periodista y especialista en el Magreb: ”España no ha dejado de ceder ante las presiones marroquíes. De hecho, es el gran valedor del reino alauita ante La Unión Europea aunque muchos de sus favores España no quiere que se sepan”.