El ministerio de Sanidad va a gastarse 600.000 euros en impresoras a color, un dinero que viene directamente de los 140.000 millones de euros de los fondos europeos. “No te lleves las manos a la cabeza, que, seguro que todo tiene una explicación”, ironizaba Joaquín Prat al conocer la noticia y antes de que Mónica Sanz detallase en qué consiste este gasto.
El encargo sería de 50 impresoras a color que saldrían a unos 12.000 euros cada impresora. Un contrato que el Gobierno considera fundamental para poder cumplir con el plan de recuperación porque asegura que va a necesitar generar mucha documentación a color. Un gasto que ha generado una gran polémica y que no ha pasado desapercibido en el plató de ‘Cuatro al día’.
“No tienen ningún sentido. Se supone que los fondos europeos son para la transformación de la economía, no para la transformación de la administración”, aseveraba Daniel Lacalle, economista y colaborador de ‘CAD’.