Colas interminables en farmacias para conseguir un test de antígenos y poder cenar con la familia con algo más de seguridad. Test que se agotan y las citas con las médicos colapsadas, ante esto, ante la necesidad, siempre aparece la ‘picaresca’ de unos cuantos. Gente que esta haciendo acopio de test para después revenderlos.
Un equipo de investigación de ‘Cuatro al día’ ha destapado cientos de anuncios que se aprovechan de este desabastecimiento de test en las farmacias y llegan a venderlo de estraperlo por un precio hasta siete veces superior.