Las aseguradoras estatales de Australia han informado este martes de que los daños causados por los incendios que han asolado el sur y sureste de la isla desde septiembre han superado los 430 millones de euros y que al menos 9.000 reclamaciones se han realizado desde entonces por personas afectadas.
En ese sentido, el tesorero de Australia, Josh Frydenberg, ha explicado que esas 9.000 reclamaciones, el 20 por ciento han sido estudiadas y al menos la mitad ya han sido saldadas. Las aseguradoras, ha contado, "han proporcionado asistencia", así como "algo de apoyo en efectivo".
Más de 140 incendios siguen activos en el estado australiano más afectado, Nueva Gales del sur, aunque todos estaban en el nivel más bajo de alerta. En este sentido, aunque la lluvia ha aliviado el trabajo de los bomberos, no ha sido suficiente como para extinguir incendios y se espera que se recrudezcan esta semana.
El Servicio de Bomberos Rurales (RFS, en sus siglas en inglés) de Nueva Gales del Sur ha detallado que al menos 1.588 viviendas han sido destruidas y 653 se han visto dañadas en todo el estado desde que el fuego comenzó a arrasar el sur y sureste del país desde septiembre. Mientras, en Victoria, casi 450 edificios han sido destruidos.
La situación en Australia se ha visto agravada después de que el frente cálido haya rebasado todas las expectativas. Entre los vientos de más de 100 kilómetros por hora y los 48 grados centígrados que se han llegado a alcanzar en localidades como Penrith, los fuegos han comenzado a comportarse "de forma errática" hasta el punto de que los bomberos sólo han podido dirigirlos a zonas seguras.
Los incendios han provocado ya al menos 24 víctimas mortales y cuatro bomberos más han resultado heridos en los más de 200 incendios de los estados australianos de Nueva Gales del Sur y Victoria, que han arrasado ya tres millones de hectáreas en el último mes.