Según cuenta Fox New, los agentes de la localidad de Wilkes-Barre informaron de que recibieron un llamada de los tíos de la niña avisándoles de que tras recogerla de la casa de sus padres, la niña olía a alcohol. Después de alertar a los servicios para la juventud del condado trasladaron a la menor al hospital de la localidad.
Una vez allí se le realizaron varias pruebas en las que se constató que tenía una alta tasa de alcohol en sangre. El informe no recoge si sufrió algún tipo de lesión como consecuencia de la ingesta de esta sustancia.
La policía y las autoridades de bienestar infantil aseguran que ya están investigando el caso.