En Estados Unidos aproximadamente el 18% de las personas entre 2 y 19 años son obesos, según el Centro de Control y Prevención de Enfermedades. Pero dentro de poco podrán ser más, muchos más. Porque Donald Trump ha ordenado que vuelvan a servirse en los comedores escolares pizzas, hamburguesas y patatas fritas.
Las nuevas reglas permitirán a las escuelas reducir la cantidad de verduras y frutas en el menú escolar. Además, los colegios también podrán disminuir la variedad de los alimentos frescos que se da a los estudiantes.
Es decir, A partir de ahora 30 millones de escolares podrán disfrutar de la comida que más perjudica su salud gracias a Donald Trump. La noticia se ha dado a conocer este fin de semana, pero sin duda, se trata de una decisión muy meditada.
Porque Donald Trump dio la orden el viernes, justo el día del cumpleaños de Michel Obama, la exprimera dama estadounidense que emprendió una batalla contra la obesidad infantil a traves de campañas en las que promovia el consumo de frutas y verduras entre los niños incluso creó un huerto en los jardines de la Casa Blanca.
Nada que ver con el actual presidente que agasajó a un equipo de deportistas que visitó la Casa Blanca
con cientos de hamburguesas. Antes de ser presidente incluso protagonizó campañas publicitarias para una conocida cadena de pizzas. Trump siempre ha hecho gala de su dieta, refrescos de cola y hamburguesas. Una receta que ahora va ha trasladar a los 99.000 comedores escolares que dependen de su administración