Macron 'castiga' sin móvil en las aulas a los menores de 15 años
Acudió él mismo a clase para comprobar cómo se comportaban los chicos. No es extrañar, porque ya sabe lo que es cantar las cuarenta a un joven por tratarle como si de un colega de videojuegos se tratara. En su idea de mejorar la educación de los jóvenes franceses (ahí está el latín como asignatura preferente) lo cierto es que esta semana se ha iniciado en Francia el curso libre de móviles para los menores de 15 años.
Los niños no solo estrenaban libros, estuches, ropa sino una nueva legislación que se ha puesto en pie gracias a Macron y que afectará a colegios de primaria y secundaria de toda Francia y, aunque es una extensión de la normativa ya en vigor desde 2010 sobre el uso de teléfonos en las aulas, lo más relevante es que los jóvenes no podrán usar el teléfono ni a la hora de comer ni durante descansos. La ley deja a elección de cada colegio si la norma se aplica también a estudiantes con más de 15 años. Del mismo modo, hay excepción a esta prohibición en el caso de estudiantes con algún tipo de divergencia.
Los estudiantes deben apagar y dejar en sus taquillas personales los teléfonos móviles, o dárselos a un profesor. Jean-Michel Blanquer, ministro de educación de Francia, considera que esta es una ley propia dekl siglo XXI y que es inevitable para mejorar la disciplina de los 12 millones de estudiantes de primaria del país. "Estar abierto a las tecnologías del futuro no implica que tengamos que aceptar todos sus usos", ha señalado. Es también una manera de luchar contra el ciberacoso y cibersexo entre menores en las aulas. No afecta, eso sí, al uso pedagógico de estos dispositivos. Veremos si los jóvenes pasan bien el mono sin móvil y no solo la vuelta al cole. Puede ser demasiado estrés.
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