Los médicos le extirparon el tumor al político, que fue candidato a la presidencia de Estados Unidos en 2008. La decisión sorprende porque las declaraciones más recientes de los médicos aseguraban que McCain estaba animado y "continúa recuperándose junto a su familia en Arizona".
"En este último año, John ha superado las expectativas de supervivencia. Pero el progreso de la enfermedad y el inexorable avance de la edad han dado su veredicto. Con su habitual fuerza de voluntad, ha elegido interrumpir el tratamiento médico", explicaba su entorno más cercano en un comunicado.
McCain, antiguo candidato a la Casa Blanca y veterano de la guerra de Vietnam, se había alejado de la vida pública. su última aparición en el Senado data de julio de 2017, cuando acudió a votar la reforma sanitaria.
Su familia ha agradecido las muestras de apoyo recibidas desde que el político republicano anunció su enfermedad y y ha reconocido a las "miles de personas" que han rezado por él.
La salud de McCain ha empeorado progresivamente y los medios norteamericanos ya se habían hecho eco incluso de los preparativos del funeral. Según fuentes familiares citadas por medios como 'The New York Times' o NBC News, el entorno del senador ha trasladado a la Casa Blanca que el presidente, Donald Trump, no estará invitado a las exequias que se desarrollarían en la catedral de Washington.
McCain, que ha intercambiado todo tipo de reproches con Trump -el mandatario llegó a burlarse de la etapa del senador en la guerra-, prefiere que asista en cambio el actual vicepresidente, Mike Pence. También habría pedido a los expresidentes Barack Obama y George W. Bush que lean unas palabras en el funeral.