Cinco niños de entre ocho meses y ocho años han muerto en el incendio de una guardería nocturna en Pensilvania. Cuatro de ellos eran hermanos. Sus padres los dejaban allí cuando trabajaban en el turno de noche.
Se investigan las causas de este fuego que arrasó por completo un edificio de tres plantas en Pensilvania, EEUU, que funcionaba como guardería nocturna. Todo apunta a que el fuego se inició en la planta superior, donde solo había un detector de humo, por un fallo eléctrico.
Los bomberos sacaron a cinco niños en estado crítico y finalmente murieron en el hospital. Cuatro de ellos eran hermano, que pasaban allí la noche porque sus padres trabajaban en el turno nocturno. Las víctimas mortales tenían entre ocho meses y ocho años.
La propietaria resultó herida y está en la UCI. Otros dos chicos, de 17 y 12 años, que pudieron escapar por una ventana fueron quienes alertaron a los vecinos. Hay abierta una investigación.