La ola de frío que azota el hemisferio norte está provocando en Rusia temperaturas de récord. De hecho, en la región de Yakutia, los termómetros han registrado unas temperaturas tan bajas que se han roto al llegar a -62 grados centígrados. Pero algunos de los habitantes llegaron a registrar 67 grados bajo cero en sus propiedades, según RT.
Estas temperaturas son tan solo 0,7 grados más “cálidas” que la temperatura más baja registrada oficialmente para un asentamiento habitado en cualquier parte del mundo, y la más helada del hemisferio norte, de acuerdo con The Siberian Times.
Por su parte, la localidad siberiana de Oimiakón, la más fría del mundo, las temperaturas han llegado a los 59 grados bajo cero. Pero esta región ostenta el récord de la temperatura más baja registrada en un sitio poblado. En febrero de 1993, sus temperaturas llegaron a marcar los 67,7 grados bajo cero, a pesar de que algunos dicen que Verjoyansk llegó en 1885 a -68 grados, algo que no está comprobado.
Pero a pesar del frío, los habitantes de estas regiones siguen llevando una vida normal. Un usuario de Facebook ha compartido imágenes en las que se puede ver cómo un mercado de pescado al aire libre sigue abierto y otra usuaria de Instagram, Anastasia Gruzdeva, ha querido publicar una foto y un vídeo de cómo se le han quedado las pestañas tras pasear por la calle a -50 grados.