Toda una clase magistral de escalada y solidaridad la que dieron estos tres oseznos en Canadá. En las imágenes, los animales no solo demuestran sus dotes para encaramarse a lo más alto de un árbol, también reflejan un gran compañerismo al esperarse los unos a los otros durante el descenso. Finalmente, los tres acaban su aventura regresando al suelo.