La conmovedora historia de Angélique Six, una joven de 13 años cuyo cadáver se halló el pasado 25 de abril en la localidad de Wambrechies, al norte de Francia, ha causado un sentimiento colectivo de protesta contra el sistema judicial en el país galo.
La menor fue secuestrada y violada antes de ser estrangulada por un hombre de 45 años que residió en el mismo barrio que la joven. Según ha detallado el fiscal de Lille, Thierry Pocquet, el detenido tomó cerveza y pastillas para la erección horas antes de llevar a cabo el terrible crimen.
Le Figaro informa que la investigación por el hallazgo del cuerpo de la joven llevó hasta a un hombre de 45 años que vivía en Wambrechies. "Muy rápidamente confesó los hechos y llevó a los agentes al lugar donde había abandonado el cuerpo de la niña", ha señalado la fiscalía.
El detenido es conductor de autobuses y según informa el medio francés, conocía a la pequeña ya que había vivido en su mismo vecindario.
CONDENADO POR VIOLAR A UNA JOVEN DE 15 AÑOS EN 1996
El autor confeso del crimen de Angélique y padre de dos hijos, fue condenado en a nueve años de prisión en 1996 por "una violación con arma" a una joven de 15 años ocurrida en 1994.
Desde que salió de la cárcel en 2000, el individuo no siguió ningún tratamiento psicológico, ya que entonces este requisito no estaba contemplado en la ley francesa, aunque sí estaba inscrito en el fichero judicial nacional de delincuentes sexuales.
"Es incomprensible tener un delincuente sexual y nadie había sido informado", ha lamentado Michel Sas, primer teniente de alcalde de Wambrechies. Cerca de la casa de Angélique se ha improvisado un monumento en honor a la memoria de la pequeña donde se han depositado decenas de rosas blancas.