Pedro Sánchez le ha señalado el camino hacia la presidencia de la Cámara Alta y se lo ha comunicado personalmente, en otra muestra de la buena sintonía que mantienen. Miquel Iceta está llamado a dar el salto a un Senado muy diferente al que aprobó al que aprobó el 155. Tras las elecciones del 28 de mayo, el PSOE tiene mayoría absoluta, y desde el otro lado, quien la tenía antes, el PP, ya ha contestado a través de su líder Pablo Casado: “El que dice que tiene que haber una consulta de autodeterminación va a estar en la Cámara que debería aplicar el 155”, ha dicho, cuestionando y criticando la decisión.
El líder del PSC, defensor de España, –de una España federal–, y de sus símbolos, favorable al indulto de los presos del procés si son condenados, pero también combativo en el Parlament al desafío independentista, quiere seguir ejerciendo ese papel y al tiempo ser la cuarta autoridad del Estado.
No obstante, antes de ser presidente del Senado tendrá que ser elegido por designación autonómica en el Parlament, ya que no se presentó en las listas del Senado de las últimas elecciones generales. Será por votación y necesitará una mayoría simple, pero, de partida, ya cuenta con el ‘no’ de ERC. Muy enfadados tras conocer la decisión a través de la prensa, según ha manifestado el presidente de la formación, Sergi Sabrià, han recalcado que votarán en contra de que la Cámara catalana le designe como senador.
"Entendemos que ya tienen los votos necesarios para tirar esta propuesta adelante y que en estos votos no cuentan los de ERC", ha dicho Sabrià, criticando las formas del PSC a la hora de proponer la candidatura e insinuando que Sánchez tendría el apoyo de Ciudadanos.
“Así no se hacen las cosas, no es una manera de tomar decisiones”, ha reprochado Sabrià, recriminando también que se "supediten las instituciones catalanas a las decisiones que tome el PSOE respecto a sus sillas".
En este sentido, han instado al PSOE a dar “respuestas” si quieren su apoyo, señalando en qué sentido deberían producirse estas: el suplicatorio de los presos independentistas escogidos como senadores o diputados en el Congreso, cuya votación será una de las primeras que se hará en el Senado.
"Tumbar este suplicatorio supondría la libertad inmediata y el fin del juicio. Nos gustaría mucho saber cuál será la posición del PSOE en este tema", ha apuntado, dejando sobre la mesa una posible condición para el apoyo. Condición que, en su lugar, Sabrià ha querido presentar, en otras palabras, como un "ejemplo excelente de las respuestas que debe dar el PSOE antes de establecer algún tipo de compromiso".
Por la configuración del Parlament, los independentistas suman 70 diputados con ERC (32), JxCat (34) y la CUP (4), de los 135 totales. ERC sugiere que Sánchez ya se habría garantizado apoyos para considerar que su deseo saldrá adelante e Iceta presidirá el Senado, sin embargo, aún no se puede dar plenamente por hecho. No hasta que se resuelva la incógnita de la designación del Parlament. Y de hecho, Ciudadanos, con sus 36 diputados en la Cámara catalana, estaría aún pensándose el sentido del voto.