El encuentro del fin de semana con más morbo e intriga por lo que pueda suponer de cara al futuro es el que ha reunido a cinco mujeres de la izquierda en Valencia, ninguna de Podemos. La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha sido recibida entre gritos de Presidenta, pero también con algún lanzamiento de huevos.
El germen de la nueva plataforma política de la izquierda, alternativa al PSOE, no ha empezado con muy buen pie. Los transportistas se han manifestado ante la puerta del Teatro Olimpia de Valencia aprovechando la presencia de la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, la gran protagonista del sábado aunque nadie lo dijera. Ha sido la primera de las cinco mujeres políticas en subir al escenario ante un teatro abarrotado y entregado con ellas. ‘Otras políticas’ ha sido el lema del acto con un objetivo elevado.
“Es maravilloso que haya tanta gente irradiando tanta energía positiva y tantas ganas de cambiar el país y yo creo que entre todos podremos conseguirlo”, ha dicho Fátima Hamed, Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía de Ceuta.
En apariencia, ha sido una charla más para tratar temas de actualidad, pero de fondo, a nadie se le escapa, un escaparate para lanzar un nueva propuesta política de izquierdas, pero sin nadie de PSOE, ni de Podemos.
“Somos todas las que estamos, no están todas las que son, pero creo que representamos a muchas que no están y yo que sé Ayuso no nos apetecía tampoco”, ha dicho Mónica Oltra, vicepresidenta de Gobierno valenciano y líder de Compromís.
Han realizado una defensa del feminismo, del ecologismo y, sobre todo, de una nueva forma de entender y hacer política, más cerca de la gente. “Sacar la política del electoralismo, sacar la política de la batalla de las siglas, esto tiene que ir de personas, tiene que ir de objetivos”, ha expresado Ada Colau, alcaldesa de Barcelona y presidenta de Barcelona en Comú.
La alternativa la lideraría Yolanda Díaz. “Creo que es el comienzo de algo que va a ser maravilloso, pero sois vosotras, no somos nosotras”, ha dicho la vicepresidenta que ha empleado un conocido eslogan para lanzar nuevas propuestas: “Sí se puede cambiar la vida de la gente”.
Además, han dejado claro que no están de paso. “No solo nos vamos a sentar hoy, vamos a seguir reflexionando y hemos venido a que este tsunami feminista sea lo que marque este ciclo político. Hemos venido aquí para quedarnos y no vamos a pedir permiso, ni vamos a pedir perdón”, ha dicho Mónica García, portavoz de Más Madrid.
Se trata de un movimiento de fondo en el tablero de la política nacional para apuntalar el bloque de izquierdas ante el avance de la ultraderecha o, quién sabe, si para dar, esta vez sí, el sorpasso al socialismo.