En Marruecos, los operarios que trabajaban en el rescate del pequeño Rayan han conseguido llegar hasta cadáver del niño. El cuerpo del menor ha sido rescatado tras permanecer cinco días a un pozo de 32 metros de profundidad. Localizado con exactitud este mediodía, los equipos de rescate han llegado al lugar donde se encuentra el cuerpo sin vida.
En todo momento se le ha suministrado oxígeno en estos cinco días de angustia que han tenido en vilo a todo el país norteafricano y al resto del mundo. Sin embargo, el niño habría muerto por inanición al permanecer cinco días bajo la tierra. No obstante, habría que esperar a los informes de la autopsia para confirmar las causas de la muerte.
Medios como 'El Faro de Ceuta' apuntan a que "el niño fue sacado urgentemente del agujero perforado e ingresado en una ambulancia que aguardaba en el lugar en medio de un gran despliegue de seguridad".
Trabajando incansablemente para salvar al pequeño, que ha resistido varios días en las profundidades del pozo gracias a que le hicieron llegar oxígeno y agua con azúcar a través de un tubo, los rescatistas han culminado con éxito una operación que, especialmente en el tramo final, –el más crítico–, se ha encontrado con numerosas dificultades asociadas al terreno, pues la amenaza de los derrumbes hacía peligrar tanto la seguridad de los efectivos decididos a salvarle como la del propio niño.